Fue un verano antes de la escuela, la primera vez que te vi, vestías una franela azul con pantalones cortos color caqui, el cabello despeinado naturalmente por la fresca brisa de verano; jugabas con una niña de rizos rubios claros, mientras que yo me dedicaba a observarte sentada desde un banco; de repente por alguna extraña razón, tus ojos encontraron con los mios, yo me sonroje y voltee la mirada. Cuando volví a dirigir la mirada hacia donde te encontrabas ya no estabas y me asuste, pensé que te había perdido de vista, pero entonces te sentaste a mi lado y me dijiste: -Hola- casi me caigo del susto, pero tu me sujetaste e impediste que no lo hiciera y eso solo ocasionó que me pusiera mas colorada, como pude te di las gracias. Me dijiste tu nombre, Andrés, uno muy común, pero el mas bello para mi, te dije el mio Nora, creo recordar que me comentabas el significado pero no te prestaba atención por encontrarme perdida en el mar chocolate de tus ojos. Me contaste que ...